
La recomendación de De Pablo a la hora de comprar una propiedad y qué va a pasar con el dólar
El economista también anticipó qué va a pasar con los créditos hipotecarios
* 24 de octubre de 2025
* 10:15
Juan Carlos de Pablo habló del dólar, los créditos y la actualidad económica en tiempos de elecciones. “Calmate, nunca te dejes llevar por las desesperaciones ni para comprar ni para vender”, recomendó De Pablo, uno de los economistas más escuchados del país, durante un encuentro organizado por la inmobiliaria Predial, del que también participó el sociólogo Sebastián Lopes Perera.
Entre un dólar que superó los $1500, una inflación que volvió a mostrar una suba en el último mes y un sistema financiero sin liquidez para prestar a largo plazo, los especialistas dejaron una serie de definiciones clave en medio de una semana caliente previa a las elecciones legislativas del domingo.
El economista Juan Carlos de Pablo analizó el impacto del escenario político en la economía. A pesar de los vaivenes electorales, “el lunes Argentina va a existir”, afirmó De Pablo, que ofreció un análisis que buscó bajar la ansiedad del mercado, señalando que el régimen político argentino es “presidencialista”, por lo que “Javier Milei seguirá siendo el presidente durante dos años más”.
¿Qué va a pasar con el crédito hipotecario?
“El crédito no es una cosa unilateral. Va a depender de si se calman las pasiones”, señaló De Pablo al ser consultado por LA NACION sobre si podría volver el crédito hipotecario.
En su diagnóstico, no hay conspiraciones ni maniobras políticas detrás de la prácticamente nula oferta de préstamos: “Esa cosa conspirativa de que los bancos no dan crédito hipotecario porque quieren joder al gobierno no me la creo. Pero sí puede ser que no tengan plata”.
La frase expone el verdadero centro del problema. Los bancos no tienen fondeo necesario para prestar la cantidad de pesos que implica el desembolso de un préstamo hipotecario a largo plazo. Sin fondeo, no hay crédito. Y sin crédito, el mercado inmobiliario seguirá siendo territorio exclusivo de quienes ya tienen los dólares en la mano.
Aun así, De Pablo deja una puerta entreabierta: en la medida en que la política se estabilice después de las elecciones y se “calmen las pasiones”, el crédito podría reaparecer. No como política expansiva del Gobierno, sino como consecuencia de un sistema financiero que se recupere.
¿Qué va a pasar con el dólar?
El economista lanzó una advertencia directa para los que paran las decisiones de inversión por miedo: “Si vos tenés ganas de comprar y aparece un vendedor desesperado que te hace una rebaja, compralo hoy. Si no, esperá una semana”.
“No tenemos forma de saber qué va a pasar con el dólar”, aseguró. En el sector inmobiliario, donde las operaciones se pactan en dólares, el movimiento de la divisa estadounidense condiciona precios, expectativas y tiempos. Pero De Pablo insiste: la calma es una estrategia de supervivencia.
Al analizar inversiones, como la construcción de un edificio, aconsejó “traspasar la carpeta”, ya que la realidad no es el informe prolijo, sino aquello a lo que se refiere el informe. Aunque reconoció la dificultad de hacer pronósticos precisos sobre el futuro (por ejemplo, al comenzar una construcción), su recomendación general fue “Hacelo”.
Y sobre los que compran dólares el viernes previo a las elecciones “para dormir tranquilos”, fue tajante: “Hacé lo que quieras, pero te podés comer un zapatazo fenomenal.” “No estoy diciendo que vas a perder, lo que digo es que la cosa está mucho más abierta”, explicó.
“El lunes Argentina va a existir. No solamente va a existir: el bar de enfrente va a abrir, el panadero va a estar, y el que vende camisas también”, dijo de Pablo, al intentar descomprimir la ansiedad que genera el periodo pre electoral.
Recordó que, gane quien gane, e insistió en que Javier Milei seguirá siendo presidente por dos años más. “La certeza es mejor que la incertidumbre; la pretensión de certeza es peor que la incertidumbre”, dijo, definiendo así la paradoja de un país que busca estabilidad en medio del caos.
En su lectura, la economía no está “mal”, sino “estancada”, una diferencia clave: no hay colapso, pero tampoco impulso. Como dato de la actividad, mencionó que “la importación de bienes de capital aumentó 40 y pico por ciento. Alguien está haciendo algo”.
El mensaje final de De Pablo para el inversor y el consumidor es evitar la desesperación y reconocer que, a pesar de la pulseada de stocks y la complejidad macroeconómica (incluida la influencia de actores como el secretario del tesoro americano), la Argentina continuará existiendo y funcionando.
¿Qué va a pasar con las ventas de las propiedades?
Por su parte, el sociólogo Sebastián Lopes Perera fue el encargado de abrir la charla, aportando un análisis del consumo y la estructura del mercado. “Si bien el mercado inmobiliario venía con un escenario de ventas muy positivo y un crecimiento de escrituras mensuales en CABA, el contexto macro ha afectado seriamente al comprador”, destacó.
El sociólogo diferenció dos tipos de actores en el mundo inmobiliario: el comprador inversor, que puede comprar en cualquier momento y acumular stock; y el comprador usuario, que es el que hoy tiene “un problema grave”, ya que el crecimiento de créditos se vio frenado por el aumento de la tasa de interés y el contexto macro, llevando a los bancos a “parar un poco la pelota” y achicar la oferta de crédito hipotecario.
El desafío para el mercado inmobiliario argentino es, precisamente, “pasar a más usuarios”, y los usuarios crecen cuando hay crédito. Por ello, si las expectativas “empiezan a volver a un clima positivo” después de las elecciones, el mercado podría enfrentar “un gran año para los hipotecarios y un gran año para el mercado inmobiliario”.
Fuente: Candela Contreras
Link Original: LA NACION



